Control de fogatas sin esfuerzo durante cada aventura
Maneja troncos encendidos con seguridad y mantén tus manos cómodas. Las pinzas para fogatas Threo simplifican la cocina y la reunión al aire libre. Construidas para durar en cualquier viaje.
Protección máxima
Las asas gruesas protegen contra el calor de las llamas cada vez. Mueve la leña con confianza sabiendo que tus dedos están protegidos.


Fuerza superior
La construcción en acero al carbono resiste el uso rudo al aire libre. Las pinzas robustas sujetan troncos o brasas calientes sin doblarse.
Portabilidad compacta
El estuche de cuero mantiene las herramientas ordenadas y fáciles de guardar. El diseño ligero significa menos volumen en tu equipo de campamento.

















Bill F.
Geniales para las noches de fogata en el patio y fáciles de limpiar. Valoro el buen agarre y lo fácil que es guardarlas.
Pat W.
Las uso cada vez que hago una fogata. El metal resistente me permite mover los troncos sin ningún problema, y todavía parecen nuevas.
Mike Z.
El mango grueso hace fácil mover brasas calientes con seguridad. Me gusta que no se doblan al levantar madera pesada.
Eve N.
Sujeta incluso los troncos encendidos sin problema y mis dedos permanecen seguros. Muy buenas para hacer s’mores con niños.
Aaron V.
¡Mandíbulas super resistentes! Ya no se me caen los troncos y los mangos nunca se sienten calientes. Muy satisfecho con ellas.
Morgan K.
Fui de campamento con mis primos y todos querían usarlas. Funcionan muy bien tanto para fogatas como para parrillas.
Isabel J.
Las fogatas son más divertidas ahora que ya no tengo miedo de quemarme. Estas pinzas hacen fácil mantener el fuego encendido.
Taylor H.
Tenerlas junto a la fogata en la noche es genial. Ya no tengo que preocuparme por acercarme demasiado. El estuche también las mantiene ordenadas.
Jake M.
Usé estas pinzas el fin de semana pasado mientras acampaba con amigos. Súper fáciles de maniobrar los troncos y el mango ni siquiera se calentó en todo el tiempo.
Chris G.
Estas pinzas hacen que sea mucho más seguro cocinar malvaviscos y salchichas. Las mandíbulas sujetan la madera con fuerza y no se resbalan, incluso con guantes puestos.